Debemos de darle una vuelta a la estrategia de marketing. Y es que cuando creíamos que teníamos `bajo control´a los millenials, llegan los centennials pisando bien fuerte en el mercado. Aunque la mayoría de ellos continúan dependiendo de la tarjeta de crédito de sus padres, son consumidores potenciales de todo tipo de contenido. Saben qué quieren y cómo obtenerlo. No se les escapa ni media.
Como ya sabemos todos los que nos dedicamos al sector publicitario, adaptar el mensaje al público objetivo es casi un mantra para la mayoría de expertos en marketing. En ese sentido, debemos conocer cuanto más, mejor, cada una de las generaciones que a día de hoy conviven en la sociedad. Saber afrontar los retos que supone cada salto generacional es algo esencial si queremos poder resultados de éxito a las marcas.
¿Profesionales de lo digital?
Exigentes, rigurosos, ágiles al procesar información, nada es lo bastante rápido digitalmente hablando para esta nueva generación. Los llamados “nativos digitales” han crecido y sobre todo, se han educado rodeados de tecnología. Ordenadores, móviles, tabletas o Smart Tv son aparatos perfectamente integrados en la vida personal y social de esta población.
¿Te costaba dinero mandar un mensaje?
Con cara de asombro, esta generación puede llegar a hacernos este tipo de preguntas. Ni por asombro saben lo importante que era sintetizar toda la información en un único SMS, acortando caracteres. Pero se pueden hacer una idea debido a que en los tweets tenemos que hacer algo parecido.
Las redes sociales, el periódico de cada día
Las redes sociales son la mayor fuente de información y de entretenimiento para ellos. Pero esto no hace que sean más despreocupados, quizás todo lo contrario. Son una de las generaciones más preocupadas por su intimidad y la información personal que dejamos en la red. Son más sensibles a los escándalos sobre espionaje en la red o noticias sobre hackers.
Para llegar a ellos, las empresas saben que deben currarse el contenido. Debe ser llamativo, curioso, colorido. El formato vídeo es el que más triunfa, por eso, se está apostando fuertemente en materia de publicidad en redes sociales como Instagram o Twitter. Los mensajes tienen que ser inclusivos, algunas de las empresas que han patinado con mensajes anclados en el pasado han quedado expuestas y ruborizadas por este público en internet y en redes sociales.
Si no está online, no existe
La venta online, y por lo tanto, la logística es otro de los pilares para el éxito de una empresa con esta generación. Si no se puede comprar online, no existe para este público, que consulta todas sus compras basándose en la información sobre el producto en internet, y sobre todo, en las opiniones y experiencias de otros consumidores con ese producto.
“Productos mundiales”, eso es en lo que se han convertido todos los productos gracias a las grandes empresas y a las gigantes tecnológicas y logísticas como Amazon o Aliexpress. Las fronteras entre países ya no son barreras para las compras de estos consumidores, que cada día disfrutan de servicios de envío personalizados. Los esperan con ansias, otro de los rasgos que caracterizan a estos consumidores, la rapidez. El control también es fundamental para ellos, por eso estas empresas ya les ofrecen servicios de información o la fase en la que se encuentra su pedido.
Influencers por delante de las marcas
A diferencia con los millenials, esta generación prefiere seguir a los influencers antes que a las marcas. Por lo que podemos vaticinar, estos prescriptores seguirán ganando terreno. Una muestra de ello, son los microinfluencers que cuentan con menos seguidores en las redes, pero que tienen una relación más cercana con los usuarios.
Una de las generaciones más “jugonas”
El advertainment o el advergaming son términos que están de moda y subiendo como la espuma en el sector del marketing y la publicidad. Para los que no sean entendidos, hablamos de la publicidad ligada al entretenimiento y la publicidad en videojuegos. Que cada día sigue ganando enteros y gastando millones en desarrollar publicidad que se adapte a este tipo de formatos. Todo esto, con el objetivo de captar a los millones de jugadores que están jugando online en este preciso momento.
Pero no por jugar más, son menos responsables. Quizás todo lo contrario, al haber crecido durante el periodo de crisis económica tienen un sentido más práctico y realista del mundo. Estudian, trabajan, y en muchas ocasiones las dos cosas al mismo tiempo. Ya que son conscientes de que una buena preparación es clave para su futuro.
Nadando entre tiburones
La información es poder. Y de eso, hace uso esta generación que no tiene miedo a manifestarse o expresar su descontento contra las organizaciones o empresas que no cumplen o que están fuera de lugar en materias como el medio ambiente o la igualdad. Por eso, las empresas deben amoldarse a esta nueva evolución de la sociedad e intentar fusionarse con ella. Si no lo hacen, se arriesgan a quedar en evidencia y a ser devoradas por esta generación en redes sociales.